Sánchez, Feijóo y Abascal juegan la carta del miedo en el ecuador de la campaña por las elecciones

Alcanzado el ecuador de la campaña, los líderes nacionales de los partidos que se presentan a las elecciones catalanas del 12 de mayo han apostado por jugar la carta del miedo. Pedro Sánchez (PSOE), Alberto Núñez Feijóo (PP) y Santiago Abascal (Vox) están lanzados a la carrera por el voto útil y de los indecisos a falta de ocho días para la celebración de los comicios, para los que los sondeos siguen augurando una victoria sin paliativos del socialista Salvador Illa.

Pedro Sánchez y el fango

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vuelto a arropar al candidato socialista, esta vez en un mitin celebrado en el Centre Cultural La Torreta de Montmeló (Barcelona). En él, ante la presencia de 2.000 personas, ha arremetido contra el PP y Vox, a los que acusa de crear un barrizal y hostigamiento, y ha instado a decidir entre "democracia o fango".

Se ha preguntado "cómo es posible que la paz social que se respira en este país se vea enfangada con todo el barrizal que la derecha y la ultraderecha han puesto en marcha". También ha criticado la campaña de hostigamiento que, en sus palabras, promueven para ocultar su programa antisocial, según ha dicho, cinco días después de anunciar su continuidad como presidente tras la demanda del sindicato Manos Limpias contra su mujer, Begoña Gómez.

Sánchez ha pedido "que nadie se quede en casa" y vote a Illa porque "cuanto más amplia sea la victoria, mayor estabilidad y mayor fuerza de Gobierno habrá" por Cataluña.

Alberto Núñez Feijóo y el lodazal

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha esgrimido un discurso parecido al del líder del PSOE en un mitin en Badalona, feudo del PP y acompañado del alcalde Xavier García Albiol. Para el dirigente popular, los socialistas "son una fábrica de bulos" y "se mueven como nadie en el lodazal".

En su caso, ha aprovechado el conflicto diplomático entre Argentina y España, concretamente entre el presidente de Argentina, Javier Milei, y el ministro de Transportes, Óscar Puente. "Es lamentable que se tensionen de este modo las relaciones con un país hermano. España merece otro nivel", ha remarcado el líder del PP, para quien hoy Puente "debería dimitir o ser cesado".

Sin embargo, ha vaticinado que ni dimitirá ni será cesado como ministro, porque Puente y Sánchez "disfrutan del lodazal en el que intentan meter a España". En su opinión, "lo hacen porque hay campaña electoral" y, de esta manera, "intentan romper dividir, fraccionar y restar el voto que está en contra del sanchismo".

Santiago Abascal y la inmigración

Mientras, Vox sigue a lo suyo. El presidente de la formación de extrema derecha, Santiago Abascal, ha propuesto este sábado "deportaciones masivas" ante la inmigración. Lo ha dicho junto al candidato Ignacio Garriga y el candidato por Girona, Alberto Tarradas, en Salt (Girona), donde hay un 37% de población inmigrante, según el Idescat, y donde el partido tiene 4 concejales.

"Es lo que Cataluña necesita, por mucho que vengan algunos a amenazarnos e insultarnos", ha añadido en referencia a 2021, cuando Abascal hizo otro mitin en Salt y algunos manifestantes le lanzaron objetos y comida. Según Abascal, el partido defiende a los inmigrantes que llegan "renunciando a imponer sus leyes, especialmente sus leyes religiosas", y su cultura, y ha abogado por priorizar las ayudas sociales para los ciudadanos nacidos en España.

Así las cosas, ha acusado al PP de no decir durante la campaña electoral catalana "ni una sola palabra" sobre inmigración ilegal ni sobre la inmersión lingüística.

Pere Aragonès y el pasado

Por su parte, el presidente de la Generalitat y candidato de ERC a la reelección, Pere Aragonès, ha alertado en su ciudad natal (Pineda de Mar, Barcelona) y ante medio centenar de personas según la organización, del "riesgo" que conllevaría que no revalidara la presidencia. Y ha señalado a Junts y PSC.

"Corremos un riesgo: que si ERC no continúa presidiendo la Generalitat, vuelvan los proyectos del pasado", ha dicho. Como viene siendo habitual, el candidato republicano ha disparado en dos direcciones: hacia Junts, porque "si votáis a los de los recortes, volverán los recortes"; y hacia el PSC, ya que "si votáis a los de la Moncloa, mandarán desde la Moncloa".

Sin concretar con quién prevé llegar a acuerdos tras las elecciones, el president ha citado nuevamente los tres ámbitos a partir de los cuales buscará alianzas: avanzar hacia un referéndum acordado; el modelo de financiación "singular" que ha planteado recientemente; y reforzar el estado del bienestar y la cultura catalana.

Salvador Illa, centro de las críticas

Illa mantiene la primera posición en todas las encuestas publicadas hasta la fecha con una horquilla de hasta 40-47 escaños, mientras que la segunda posición se la disputan el presidente de la Generalitat y candidato de ERC, Pere Aragonès, y el de Junts+, Carles Puigdemont, que en algunos sondeos se sitúan en un empate técnico.

Ante la posición de salida del socialista, el resto de candidatos han puesto sobre él el foco de las críticas, por lo que Illa ha apelado al voto para tener fuerza suficiente para gobernar en solitario.